Desde siempre, utilizando el controlodor propietario de Nvidia, me quedaba con las terminales virtuales (VTs, la que se activa con Ctrl-Alt-F1) ciegas, es decir, funcionaban pero no veía nada, sólo un fondo negro.
Ya me había acostumbrado, o resignado más bien, y últimamente hasta optaba por Nouveau a pesar de su bajo rendimiento. Pero al instalar Wheezy con KDE, el tema por defecto incluía efectos que ralentizaban mucho el escritorio. Así que volví a probar el controlador propietario de Nvidia para volver a quedarme sin ver nada en las terminales virtuales.
Así que volví a dar una vuelta por los caminos de Google y encontré un par de pistas. La primera sugería añdir el parámetro de Kernel vga=normal actualizando la configuración de GRUB2. Esta opción no funcionó, pero investigando los diferentes valores que podría tener dicho parámetro dí con esta tabla de modos VESA. Tras modificar /etc/default/grub para pasar el parámetro vga=791 y ejecutar update-grub (ambas cosas como root, claro) conseguí mantener las terminales virtuales junto con el driver propietario NVIDIA.
/etc/default/grub:
Desde siempre, utilizando el controlodor propietario de Nvidia, me quedaba con las terminales virtuales (VTs, la que se activa con Ctrl-Alt-F1) ciegas, es decir, funcionaban pero no veía nada, sólo un fondo negro.
Ya me había acostumbrado, o resignado más bien, y últimamente hasta optaba por Nouveau a pesar de su bajo rendimiento. Pero al instalar Wheezy con KDE, el tema por defecto incluía efectos que ralentizaban mucho el escritorio. Así que volví a probar el controlador propietario de Nvidia para volver a quedarme sin ver nada en las terminales virtuales.
Así que volví a dar una vuelta por los caminos de Google y encontré un par de pistas. La primera sugería añdir el parámetro de Kernel vga=normal actualizando la configuración de GRUB2. Esta opción no funcionó, pero investigando los diferentes valores que podría tener dicho parámetro dí con esta tabla de modos VESA. Tras modificar /etc/default/grub para pasar el parámetro vga=791 y ejecutar update-grub (ambas cosas como root, claro) conseguí mantener las terminales virtuales junto con el driver propietario NVIDIA.
/etc/default/grub:
Desde siempre, utilizando el controlodor propietario de Nvidia, me quedaba con las terminales virtuales (VTs, la que se activa con Ctrl-Alt-F1) ciegas, es decir, funcionaban pero no veía nada, sólo un fondo negro.
Ya me había acostumbrado, o resignado más bien, y últimamente hasta optaba por Nouveau a pesar de su bajo rendimiento. Pero al instalar Wheezy con KDE, el tema por defecto incluía efectos que ralentizaban mucho el escritorio. Así que volví a probar el controlador propietario de Nvidia para volver a quedarme sin ver nada en las terminales virtuales.
Así que volví a dar una vuelta por los caminos de Google y encontré un par de pistas. La primera sugería añdir el parámetro de Kernel vga=normal actualizando la configuración de GRUB2. Esta opción no funcionó, pero investigando los diferentes valores que podría tener dicho parámetro dí con esta tabla de modos VESA. Tras modificar /etc/default/grub para pasar el parámetro vga=791 y ejecutar update-grub (ambas cosas como root, claro) conseguí mantener las terminales virtuales junto con el driver propietario NVIDIA.
/etc/default/grub:
Desde siempre, utilizando el controlodor propietario de Nvidia, me quedaba con las terminales virtuales (VTs, la que se activa con Ctrl-Alt-F1) ciegas, es decir, funcionaban pero no veía nada, sólo un fondo negro.
Ya me había acostumbrado, o resignado más bien, y últimamente hasta optaba por Nouveau a pesar de su bajo rendimiento. Pero al instalar Wheezy con KDE, el tema por defecto incluía efectos que ralentizaban mucho el escritorio. Así que volví a probar el controlador propietario de Nvidia para volver a quedarme sin ver nada en las terminales virtuales.
Así que volví a dar una vuelta por los caminos de Google y encontré un par de pistas. La primera sugería añdir el parámetro de Kernel vga=normal actualizando la configuración de GRUB2. Esta opción no funcionó, pero investigando los diferentes valores que podría tener dicho parámetro dí con esta tabla de modos VESA. Tras modificar /etc/default/grub para pasar el parámetro vga=791 y ejecutar update-grub (ambas cosas como root, claro) conseguí mantener las terminales virtuales junto con el driver propietario NVIDIA.
/etc/default/grub:GRUB_CMDLINE_LINUX_DEFAULT="quiet vga=791"